La del UCAM CF es la increíble temporada menguante. No lo ha podido evitar, tampoco con Munitis. Con él, la propuesta de juego es muy definida. Pero sin resultados que la refuercen, el ánimo baja y el equipo flaquea. Eso pasó en el empate ante el Mérida (1-1). Un equipo que empieza a recitar la lección sin entusiasmo. No ganó. No lo ha hecho aún con Munitis y apenas lo ha hecho en 2018, en donde lleva más del doble de derrotas (7) que de victorias (3). Descarrilado en la tabla, el Mérida, débil a domicilio, no fue una oportunidad sino un estorbo en una temporada condenada a la mediocridad. Si el Extremadura ganara su partido, los universitarios quedarían matemáticamente fuera de los 'play-offs'. Todavía restarían tres jornadas de penitencia. Así de crudo es.
Al UCAM, por unas cosas u otras, no se le ha podido relacionar con un estilo concreto durante la temporada. Ahora sabe cómo quiere jugar. Después de los madrugadores disparos de Kike Pina y Santi Villa, sin consecuencias, los de Munitis no se salieron del guión. Con tres centrales en fase ofensiva, cuidó la pelota. En este momento es como se siente más seguro, llevando la iniciativa. El Mérida, mientras, contraponía un juego más físico. También fue inteligente. Desactivó la presión alta del UCAM con una salida en largo hacia Javi Gómez, que descargaba, abría y buscaba el remate. Y si no, forzaba faltas. Su titularidad, como la de Golobart, fue el premio a los buenos minutos ante el Melilla.
Los centros, recurso ganador en esa remontada ante los norteafricanos, también llegaron con Kiu y Santi Villa. El zurdo no pudo penalizar las muchas opciones a balón parado que concedió un UCAM con problemas de creación. Los jugadores no conectaban, no se encontraban. No sabía superar el bloque duro e intenso del Mérida y apenas lo intentó con los disparos de Urko Arroyo y Bustos. Antes llegó una mejor ocasión, con Colinas ganando la espalda, pero de tanto esperar escorado la llegada de un rematador la oportunidad caducó. En un partido más competido que brillante, el aspecto era más conveniente para los de Nafti. Santi Villa, de libre directo, y Kike Pina no encontraron la portería por muy poco.
Podría haber llegado entonces el gol visitante, pero lo hizo entrada la segunda parte. Un balón largo, casi extraviado, lo alcanzó Iván Aguilar. Como en sus días en el UCAM mostró oficio en el área. Puso la pausa justa para tirar en el momento preciso. Solo la agilidad de Javi Jiménez evitó su tanto, pero quedó vendido en el rechace. Marcó Germán. Era el momento menos esperado para el golpe. Los de Munitis venían de sus mejores minutos, con varias ocasiones para convencerse de que podían imponerse desde la pelota. Marc cabeceó alto, Góngora disparó al lateral de la portería y otra vez Marc, tras iniciar un ataque, disparó para lucimiento de Lázaro. Finalmente, Vivi se probó desde media distancia y rozó la base del poste.
Mientras tanto, el Mérida descontaba cambios y sumaba bajas. Entonces llegó ese 0-1. El UCAM, tan lastimado anímicamente, no parecía capaz de reponerse con convicción. No ayudaba la grada, con más espectadores que aficionados. La remontada quedaba lejana, pero al menos llegó el empate cuando Onwu asistió a Gerard Oliva, que hizo a las puertas de mayo el primer gol de un delantero en 2018. No hubo mucho más en los cuatro minutos añadidos, de sobra para alguno. Solo un intercambio de balonazos. Munitis llegó tarde en una temporada que acaba pronto. La increíble temporada menguante.
FICHA TÉCNICA
UCAM CF (4-1-4-1): Javi Jiménez; Fran Grima (Gerard Oliva), Dani Pérez, Kitoko, Góngora; Vivi; Colinas (Isi Ros), Bustos, Urko Arroyo (Abel), Marc Fernández; Onwu.
Entrenador: Pedro Munitis.
Mérida (4-4-2): Lázaro; José Cruz (Iván Pérez), Aguza, Golobart, Kike Pina; Kiu, Julio de Dios, Chema Mato (Checa), Santi Villa; Germán y Javi Gómez (Iván Aguilar).
Entrenador: Mehdi Nafti.
Goles: 0-1 (69') Germán. 1-1 (82') Gerard Oliva.
Incidencias: La Condomina, 1.835 espectadores. Jornada 35 del Grupo IV de Segunda B (21 de abril de 2018).
SALA DE PRENSA
Pedro Munitis
Mehdi Nafti
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